NAMA

El complejo balance entre ambiente, sociedad y desarrollo en una nación cuenta ahora con este instrumento reconocido internacionalmente que busca, más allá de la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, impactar de manera positiva en aspectos claves para el desarrollo tales como la conservación del ambiente, el crecimiento económico, la reducción de la pobreza y el bienestar común, a través de efectos reales, medibles y verificables.

El propósito de una NAMA es escalar aquellas medidas de mitigación del cambio climático económicamente más efectivas y ambientalmente más beneficiosas que puedan surgir en distintos sectores de la economía de un país. 

Para esto se requiere en primer lugar una identificación de las acciones con las características mencionadas y su posterior priorización. Sobre esta base, en FINCEC diseñamos la solución en forma de documento conceptual de la NAMA integrando aspectos de política de cada país, región, gobierno local o grupo proponente con los sistemas de medición, reporte y verificación de los impactos esperados, el financiamiento para el desarrollo de la iniciativa, y la reducción de emisiones.

La adopción de NAMAs para países en desarrollo, facilitadas mediante tecnología, financiación y actividades de fomento de capacidades, constituye un paso concreto para desacoplar las emisiones de GEI del desarrollo de un país, región o sector.